Consejos para reducir los costes de tu empresa agroalimentaria

La reducción de los costes de nuestra empresa agroalimentaria es uno de los factores claves para aumentar la competitividad de la organización. No se trata de realizar recortes sin más en partidas como la de personal o de inversión en inmovilizado (balanzas, vehículos de reparto, equipos informáticos, etc.).

Para realizar una reducción de costes coherente y que no implique una bajada de nuestra productividad y beneficios, debemos examinar previamente nuestra cuenta de resultados. A buen seguro detectaremos partidas susceptibles de ajustar en sus costes para que no pongan en entredicho nuestro nivel de productividad y volumen de ventas. De esta manera, ayudaremos a aumentar la competitividad del almacén y, por consiguiente, los beneficios.

En este artículo te proponemos una serie consejos con este objetivo: aumentar la competitividad de tu almacén de fruta y verdura vía costes sin comprometer tu productividad.

Clientes poco rentables   

Realizar un análisis pormenorizado de las rentabilidades de nuestros clientes puede arrojar a veces sorpresas. Desvelar, por ejemplo, que el que creíamos que era uno de nuestros mejores clientes y al que le dedicamos toda nuestra atención junto a una gran cantidad de recursos, realmente no nos es rentable, es decir, perdemos dinero con él.

 Realizar una contabilidad analítica o bien disponer de un software de gestión para nuestro almacén que nos facilite las rentabilidades de nuestros clientes se nos hace imprescindible para detectar a este tipo de clientes.

Gestión de proveedores

No se trata tan solo de la negociación del precio de compra de la fruta o de cualquier otro bien y servicio. Debemos tener una visión global de los costes y de los servicios adicionales que nos ofrece nuestro proveedor. También deberíamos contemplar la calidad del producto, los tiempos de entrega, costes de transporte, etc.

La valoración conjunta de todos estos factores debe indicarnos qué proveedores nos proporcionan un menor coste de compra total.
Para ello, de nuevo se nos hace imprescindible disponer de una herramienta de gestión que nos permita computar todos los costes asociados a la compra y facilitar un análisis comparativo de nuestros proveedores.   

Gestión de Stocks

Otro punto clave para la reducción de costes en el sector de la distribución agroalimentaria es la optimización de los inventarios. Esto nos ayudará a reducir costes de espacio e instalaciones, costes de conservación y de merma.
También una gestión inteligente de tu stock. Creando una predicción a varios días o semanas vista de la posible demanda de tus clientes puede ayudarte claramente a la rentabilizar tu almacén.

En resumen, se trata de encontrar el equilibrio entre la reducción de los costes de inventario y el óptimo nivel de servicio, con el fin de no sufrir roturas de stock ni de reducir nuestras ventas.

Costes de servicios corrientes

Con frecuencia tenemos una extraña tendencia a dar por sentado los costes de los servicios corrientes (suministro de agua, luz, telefonía, internet, seguros, etc.) sin plantearnos la posibilidad de una reducción de estas facturas negociando o buscando otros suministradores. Hoy en día disponemos de multitud de empresas que ofrecen estos servicios. El sondear el mercado en busca de una buena tarifa quizá nos haga reducir nuestros costes de manera considerable a final de año.

Fijar indicadores

De poco o nada servirá haber realizado un esfuerzo por reducir los costes de nuestro almacén hortofrutícola si no establecemos herramientas informáticas e indicadores de seguimiento que nos ayuden a monitorizar los gastos.
Son muchos los indicadores financieros, de control o logísticos que podemos utilizar para el seguimiento de nuestros costes. Hablaremos en otra ocasión a fondo de los indicadores. No obstante, para los más impacientes, enumeramos unos cuantos indicadores que a bien seguro podrán ser de utilidad:

    • Costos de materia prima
    • Costes de mano de obra
    • Costos de contratos de servicios
    • Costo unitario de venta
    • Tamaño óptimo de inventario
    • Costes de tiempo ocioso
    • Punto de equilibrio
    • Medición de mermas
    • Margen de contribución

En definitiva, hay múltiples formas de reducir costes en nuestra empresa, y no solo desde el punto de vista financiero (analizando beneficios que nos aporta cada cliente o los  costes que nos supone cada proveedor), sino que la optimización del stock y el uso de herramientas informáticas e indicadores de seguimiento pueden contribuir notablemente a aumentar nuestra rentabilidad. Si tienes dudas, podemos asesorarte sin compromiso.  

keyboard_arrow_up
Salir de la versión móvil