Nuevas ayudas en Extremadura para la industria agroalimentaria

La junta de Extremadura ha aprobado recientemente la inversión de 22,5 millones de euros en el sector industrial agrícola. Buena parte del presupuesto —en concreto un 75%— lo financia el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader).

Isabel Gil Rosiña, portavoz de la Junta regional, explica que estos incentivos se dirigirán a a la transformación, comercialización  y desarrollo de productos hortofrutícolas, apelando al éxito de las últimas ayudas que se aprobaron para este fin. Gil Rosiña aportó datos sobre el papel fundamental de la industria agroalimentaria en Extremadura: actualmente son más de 1200 empresas, que representan un 1,91% del total,  las que ejercen su actividad en este sector y tienen contratadas a 12.420 personas (un 2,53% de los ocupados).

Estas ayudas están destinadas a personas físicas o jurídicas y titulares de empresas hortofrutícolas que tengan su domicilio fiscal en Extremadura, siendo requisito indispensable el ejercicio de una actividad económica en la región.

Según la reseña del Consejo, la inversión mínima auxiliable será de entre 25.000 y 20.000.000 euros.

Cabe señalar otro decreto aprobado en esta convocatoria, que consiste en ayudas enmarcadas en el PDR 2014-2020 para realizar actividades de transferencia, conocimiento e información entre agricultores y visitas a explotaciones. Con estas ayudas se pretende aumentar el nivel de cualificación profesional de los productores agrícolas, ganaderos y silvicultores, así como el apoyo del relevo generacional en el medio rural evitando el envejecimiento del mismo.

Por último, la producción vitícola fue otro de los sectores destacados en la Junta. En relación con la nueva normativa europea y española, se establece un nuevo decreto que obliga a la adaptación de las disposiciones específicas en materia de potencial vitícola, además de aprobarse un nuevo régimen de autorizaciones que se aplicará en exclusiva al viñedo.

En resumen, la aprobación de estos incentivos contribuirán a que el sector agroindustrial siga creciendo en la región de Extremadura y animará a estas empresas a invertir en ámbitos tan esenciales como el de la tecnología.

 

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